30 Mar Stand by Me
Exitosa adaptación de una novela de Stephen King, que se aleja de los habituales trabajos de terror del creador de textos como “Carrie”, “Cujo”, “Christine” o “The Shining” centrándose en aspectos mucho más dramáticos y, aparentemente, autobiográficos. Ambientada en 1959, la historia sigue a un grupo de amigos (River Phoenix, Wil Wheaton, Corey Feldman y Jerry O’Connell) que después de enterarse que hay un cadáver en un bosque relativamente cercano, deciden emprender la aventura de ir a verlo con sus propios ojos. Todo ello contado bajo la perspectiva adulta de uno de ellos (Richard Dreyfuss), que decide escribir sobre el tránsito de la infancia a la adolescencia después de la muerte, ya como adulto, de uno de estos muchachos. Reiner consiguió una enorme química entre su joven grupo de actores y, ello, unido a los temas que trata, hizo que consiguiera una película muy sólida, más dirigida al público adulto que al infantil, con situaciones insólitas para el cine actual americano como la de ver a niños fumando en pantalla o empleando un lenguaje que a día de hoy sería considerado totalmente incorrecto.