Messerschmidt
-1
archive,tag,tag-messerschmidt,tag-119,bridge-core-3.3.2,qi-blocks-1.3.4,qodef-gutenberg--no-touch,qode-optimizer-1.0.4,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,vertical_menu_enabled,qode-title-hidden,qode-smooth-scroll-enabled,qode-child-theme-ver-1.0.0,qode-theme-ver-30.8.3,qode-theme-bridge,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-8.0,vc_responsive

Adaptación cinematográfica de la novela gráfica de Alexis Nolent y Luc Jacamon, escrita para la pantalla por Andrew Kevin Walker, autor del guión original de “Se7en” (1995) para David Fincher, quien también es el director del presente título, en su primera colaboración en los veintiocho años transcurridos desde el icónico film protagonizado por Brad Pitt y Morgan Freeman. En esta ocasión, los cineastas siguen a un asesino (Michael Fassbender), que prepara metódicamente un asesinato por encargo que, sin embargo, sale mal. Por consiguiente, debe emprender la huida y, desgraciadamente, una venganza contra aquéllos que tomaron represalias contra él como consecuencia de su fallo. Es evidente que David Fincher, trabajando para Netflix, no estaba interesado en realizar una película de acción o ni siquiera un thriller más o menos comercial, porque “The Killer” es un film que pretende ser reflexivo, con una narrativa concisa y de escasas florituras, más allá de que el realizador de “Zodiac” y “The Social Network” siempre es uno de los directores más interesantes en lo que respecta a su trabajo de cámara. Pero sin embargo, lo que ocurre en pantalla es tan frío y tan distante que, teniendo en cuenta que se trata de una venganza por episodios, tampoco es demasiado interesante y mucho menos apasionante, por lo que al final, dejando de lado algunos detalles (el episodio del perro y la pelea), “The Killer” es un film con tanto oficio como fallido en su conjunto.

Producción de Netflix, gracias a la cual David Fincher pudo recuperar un guión escrito por su padre Jack Fincher, que sigue la figura del guionista Herman Mankiewicz (Gary Oldman), hermano mayor del más conocido Joseph Mankiewicz, y cómo llevo a cabo el proceso de escritura de la obra más conocida de Orson Welles, “Citizen Kane” (1941). Se trata por consiguiente de una película de época, que trata además de hacer un retrato del Hollywood de la década de 1930 y de los poderosos personajes que la dominaban: desde Louis B. Mayer a Irving Thalberg, Joseph Von Sternberg a David O. Selznick, a incluso famosos guionistas como Ben Hecht, Charles Laderer o el polifacético John Houseman, que aparece junto a Orson Welles como uno de los hombres que participó en el desarrollo del debut cinematográfico el director. Sin embargo, a pesar del gusto por el detalle, el guión de Fincher padre es muy insulso, y la película de Fincher hijo funciona mucho mejor cuando se centra en la personalidad de su excéntrico protagonista, que cuando trata de describir el Hollywood de los años 30. Charles Dance, Arliss Howard, Lily Collins y Amanda Seyfried secundan a Gary Oldman.

Serie creada por David Fincher para Netflix, basada al parecer en investigaciones y trabajos reales del FBI y que está ambientada hacia 1977. El protagonista es un joven agente (Jonathan Groff), quien tras una operación fallida es relegado a dar clases formativas junto a otro agente más veterano (Holt McCallany) viajando por el país y estudiando casos concretos de crímenes reales. Para intentar resolverlos, los agentes comienzan a entrevistarse con asesinos en serie a fin de estudiar su psicología y tratar de aplicar lo aprendido para resolver los nuevos casos que se van presentando. Pero la cercanía con los asesinos y sus mentes provocarán un fuerte impacto en el protagonista. Hannah Gross, como su novia, así como Anna Torv, como una psicóloga que en principio colabora con el equipo y posteriormente se une al mismo, forman el reparto principal, en el que Cameron Britton, como uno de los peligrosos asesinos que aparecen en los diez episodios de esta notable primera temporada, crea una gran impresión.

Language / Idioma