30 Mar Pale Rider
Tercero de los cuatro Western dirigidos e interpretados por Clint Eastwood, que retoma el argumento de “Shane” (George Stevens, 1953): los habitantes de un pequeño poblado del norte de California, dedicados a la búsqueda de oro, son atemorizados por un terrateniente local (Richard Dysart) que pretende quedarse con sus tierras. Es entonces cuando aparece un misterioso predicador (Clint Eastwood), que no solo hace frente al villano y sus hombres, sino que posee extrañas cualidades sobrenaturales y un pasado misterioso. Aunque por aquél entonces Eastwood ya contaba con una contrastada y sólida carrera como realizador, el éxito de “Pale Rider”, tanto crítico como de público, es uno de los pilares sobre los que se edifica su prestigio como cineasta, refrendado posteriormente por éxitos como “Unforgiven”, “Mystic River” o “Million Dollar Baby”. “Pale Rider” no solo ofrece a Eastwood en uno de sus mejores papeles –el del “hombre sin nombre”- sino también una narrativa muy sólida y un elevadísimo nivel de entretenimiento, que hacen de este un film imprescindible.